Críticas y convergencias con la Teoría de la Dependencia
La crítica de Cueva contribuyó a reformular la teoría marxista de la dependencia. Cuestionó tempranamente el funcionalismo sin sujetos de Cardoso y el exogenismo mecánico de Frank. Objetó los razonamientos históricos pan-capitalistas y atribuyó el subdesarrollo a la preeminencia de la gran propiedad agraria.
Empeñado en polémicas con el singularismo regional, rechazó la existencia de leyes específicas del capitalismo dependiente. Desenvolvió intuiciones del endogenismo tradicional sin compartir sus conclusiones. Extrajo un balance opuesto a Marini de lo ocurrido en Chile con Allende, pero convergió en los debates con el pos-marxismo y los neo-gramscianos.
El acierto de Cueva se verifica en el contraste con la trayectoria seguida por la Teoría de la Regulación. En su madurez sugirió una síntesis teórica que clarifica la distinción entre subdesarrollo, periferia y dependencia. Ese empalme supera falsas contraposiciones y resuelve el status teórico de la dependencia con la idea de paradigma. También ilustra la pérdida de utilidad del endogensimo frente a la primacía total de las estructuras capitalistas.